Ahora, la clase de inglés con el mp3

ABC.es (26 de enero de 2008)

La reciente demostración de escolares turolenses con los tablet PC y la pizarra digital ante Bill Gates ha sido un estímulo en la aplicación de las nuevas tecnologías a la enseñanza en Aragón. Tras la experiencia en Berlín con el creador de Microsoft, Educación trabaja ya en la incorporación de nuevos sistemas tecnológicos a las aulas.

Según avanzó ayer la consejera Eva Almunia, prepara un proyecto para el empleo de «una herramienta de moda», los aparatos reproductores MP3 y MP4, a la enseñanza de lenguas extranjeras en Secundaria.

Se trataría de que el alumno, gracias a las posibilidades que ofrecen los ficheros de audio «podcast», ir escuchando a través de los auriculares aquello que se ha trabajado con el profesor en clase y mejorar así la dicción.

Junto a este nuevo programa, su Departamento trabaja en la extensión del sistema de «tablet PC» en el que Aragón es pionera y en el que Bill Gates ha visto el futuro de la enseñanza.

Desde que Microsoft puso a disposición de los alumnos del pequeño pueblo turolense de Ariño los 16 primeros, se ha pasado ya a los 12.500 ordenadores de este tipo en los centros educativos aragoneses y, tras su puesta implantarlos en los públicos, ahora se está ampliando a los concertados.

Asimismo, las tres Facultades de Educación de la Universidad de Zaragoza se están implicando en este nuevo modelo educativo y ya empiezan a contar para la formación de profesores con estas nuevas tecnologías. De hecho, los profesores y la Administración han tenido que ir aprendiendo sobre la marcha cómo aplicarlos. Porque, según Eva Almunia, el empleo de las nuevas tecnologías «no es un fín en sí mismo, es algo más». En este sentido, no se pretende que los niños aprendan por esta vía sólo Informática, sino Ciencias Naturales, Plástica o Música.

«Más tiempo para leer»

Por otra parte, no cree que la introducción de estas tecnologías vaya en detrimento del fomento de la lectura, uno de los retos pendientes de la educación en España a la vista del último informe PISA. Al contrario, defiende que «trabajar de esta manera hace que tengamos más tiempo para leer» y recuerda que en una oficina en la que se utiliza el ordenador, al lado se suele tener papeles. Además, considera que a los niños actuales les cuesta menos leer en la pantalla que a sus padres.